El masaje egipcio es una practica milenaria y se utiliza con dos fines, como terapia física, para tratar adherencias, tensiones y lesiones musculares y como método sanador para el equilibrio y la armonía espiritual.
Durante el masaje egipcio se aplican aceites esenciales procedentes de flores y plantas que mantienen sus propiedades iniciales consiguiendo unos aromas muy intensos junto con toallas calientes.
Dichas esencias van directamente al cerebro y son capaces de transportarte a recuerdos y emociones diferentes.
Tu cuerpo se sumergirá en los sentidos del tacto y el olfato, trabajando el sistema límbico para equilibrarnos tanto física como energéticamente.
Te encantará !!!